Los stickers con la imagen de un tigre mostrado sus filudos colmillos y un Bruce Lee en señal de ataque, infundían terror en toda la provincia de Ascope. No había casa, vehículo y negocio en los distritos de Casa Grande, Paiján y Chocope que llevaba impregnada este sello como muestra de que sus propietarios pagaban un cupo a ‘Los malditos de Ascope’, cuyos cabecillas ordenaban crímenes y extorsiones desde distintos penales del país.
Este grupo delictivo, desarticulado la madrugada de ayer, había ganado poderío tras el golpe que la Policía y la Fiscalía asestó hace unos meses a la banda lideraba por el temido secuestrador Henry Mamerto Florián López (a) ‘Cojo Mame’. Bajo la premisa de “a rey muerto, rey repuesto”, ‘Los malditos de Ascope’ empezaron a realizar llamadas, balear y colocar explosivos en las casas de sus víctimas, pegando inmediatamente sus distintivos. Creían que su “negocio”, el cual les permitía acumular aproximadamente 100 mil soles al mes, tenía para rato.
Lo que nunca imaginaron es que desde hace cuatro meses, agentes de Inteligencia, del grupo Sirius y de la Fiscalía Contra el Crimen Organizado, les seguían sus pasos, escuchando sus planes a través de las interceptaciones telefónicas.
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